«San Antonio de los Alemanes»

La iglesia de San Antonio de los Alemanes.

Esta semana no nos movemos de nuestro barrio. Malasaña, esconde uno de los tesoros más desconocidos de Madrid; hablamos de la Iglesia de San Antonio de los Alemanes, en la castiza calle de La Puebla, nº20.

Alemanes
Construida en 1633, adjunta al «Real Hospital» que albergaba a los enfermos portugueses residentes en Madrid, inicialmente se denominó Iglesia de San Antonio de Padua, ya que fue a este santo al que quedó encomendada su capilla.

Tras la independencia de Portugal, en 1689, la Reina Mariana de Austria, la cedió para culto a los alemanes católicos que residían en la capital, modificando así su antigua denominación por el nombre actual.
En 1702, Felipe V concedió la administración del recinto a la «Hermandad del Refugio», que desde 1615 se encarga del conjunto desempeñando las siguientes funciones: mantenimiento del comedor gratuito (al que tienen acceso sin discriminación alguna, todos aquellos que deseen, sin más límite que el que imponga su capacidad), del Colegio Purísima Concepción, (fundado en 1651) y de la Residencia Nuestra Señora del Refugio, (para personas mayores) y por último, como no podía ser de otra manera, ofreciendo culto público de la iglesia sobre la que trata este post.

cupula
Como dijimos al principio, este edificio alberga una de las iglesias más bellas y sorprendentes de la ciudad. Su sobrio exterior esconde, unas pinturas únicas realizadas al fresco por Lucas Jordán, Francisco Carreño, y Francisco Ricci; un espectacular retablo mayor del arquitecto Miguel Fernández y sobre todo, una sobrecogedora cúpula decorada con una alegoría de la Gloria de San Antonio; todo ello enmarcado en una original planta oval que otorga mayor singularidad si cabe al edificio.

altar
La iglesia de San Antonio de los Alemanes, por sus excelentes condiciones acústicas, además tuvo una destaca actividad musical, manteniendo un maestro de Capilla hasta 1952; que fue Moisés Baylos Albéniz, sobrino del maestro Isaac Albéniz. Un par de datos, antes de terminar: en 1887 el exterior fue restaurado por el arquitecto Antonio Ruiz de Salces, quien dio uniformidad al conjunto formado por la iglesia y la Hermandad y en 1973, fue declarado Monumento Nacional.
Sin lugar a dudas, una joya del barroco madrileño que nadie debería perderse y que se encuentra a tan sólo 3 minutos a pié de nuestro local de Plaza de la Luna. Hasta la semana que viene.